#14. Mixtape del presente
Crónica samplera con pedacitos de cosas vividas en el Festival Harlem 2024
Hola, ¿cómo estás?
👾 Saludo a los nuevos suscriptores/as: More, Santi, Pancho, Majo 🙌🏾 Gracias por los likes, comentarios, compartidas, mensajes y por las devoluciones face-to-face: Agus, Cari, Rocío, Fran, Willy, Ana, Mar, Chela, Juli, Camila, Alfredo ☕ Recordá que podés regalarme un cafecito al final de este envío.
Outdoor
En el último newsletter contaba que anduve dando vueltas por el Harlem. Mi kilometraje en festivales no es tan elevado como quisiera, pero cuenta con algunos Cosquín que en otra oportunidad detallaré. Decía que fueron dos jornadas intensas, adrenalínicas en un lugar icónico de la cultura santafesina: la Estación Belgrano. Parezco un casete rallado, pero uno de mis últimos poemas, aún en proceso, nombra la ex estación de trenes de la que hace un tiempo vivo realmente cerca. Algún día -¡cómo me gusta prometer, che!- lo compartiré por estos lares.
El primer día ingreso poco antes de las 16. Hago una tarea apasionante: reconocimiento del terreno. Stands, escenarios, baños químicos, caras, outfit. Influencer por aquí, influencer por allá. Me dejo estacionado entre la alfombra de cuerpos que se tuesta al rayo del sol mientras canta Clara Cava. Se cruzan tu mirada y la mía grabo para mis adentros, piano incluido. Está tan contenta que regala un próximo estreno. “Pintó”. Después del show, en un stand en elevación, bajo la ráfaga de un viento cariñoso y la ráfaga -en términos radiofónicos- de Turf, hablo con Clara. Sube la voz, se acerca, ametralla: rush de tiempo, nervios extras, mucha data sucediendo. “Estos días de festivales son los que más te entrenan”, dice. Sus ojos proyectan dos imágenes. Mucha gente mirando el show con la remera de Ysy A. Una chica que no la conocía se acerca llorando después del show por lo que le provocó una de sus canciones.
Alternativo
Salgo para alternar, ahre. Necesito aire, profundidad de campo, la santa desprolijidad. Hay un pelotón orillando -qué palabra hermosa- la pista por donde volaron un par de motos al ritmo de las barras. Willy Bronca me provoca desde el vamos, necesito verlo. Es que tiene el nombre artístico de mi hermano y el apellido de la sensación que debemos capitalizar de una vez por todas. Marcha 1, 2.
Buchoneo al celular unas líneas del rapero. Algunos tiran cosas que a mí me re sirven. Lo dice tantas veces que a mí me re sirve. Como me sirve, despegando un poco el utilitarismo capitalista del referente (yendo del siervo al servidor), sus Sr. Cobranza del presente: No hay plata, No la ven. Anoto: Willy tiene bronca. Agrego: Por eso niega a los que niegan hackeando sus consignas.
Indoor
Vamos al escenario indoor. Veo colas de gente esperando jugar por un premio o recibir su remera estampada. La música de Silvestre y La Naranja reúne a un conjunto notable de fans y es, a la vez, la banda sonora de los esperantes. Escucho el recital paladeando la pulpa de una entrevista que hicimos a propósito de “Sueño cítrico”. Manija de baile llego óptimo al recital de Indios.
Ser grande es remitir todo a una experiencia previa. 2017. Empiezo una pasantía el día 1° de agosto, a los días conozco a alguien. Vamos a ver a Indios. Raramente, la crónica que escribí luego del show envejeció bien. Es breve, juega y se la juega, termina con suspenso. Como indica cierta regla no escrita, para el final, quedó el hit. “Lucidez” trajo lo nuevo y preparó el terreno para la canción que todos querían escuchar, “Jullie”. Podría haberme retirado del oficio ahí y no hubiera estado mal.
*
Pasan 24 horas. Hablo como si me hubiera quedado encerrado en la Estación Belgrano. Bueno, estuve a unas cuadras de eso. ¿Dije adentro? Sale otra postal indoor. En un festival que se precie de ser santafesino tiene que tocar sí o sí Un verano (a tono, desde el nombre, con la calor, uno de los componentes inconfundibles de la ciudad cordial). Un verano es la banda de Chano (obvio que iba a rimar). El cantante de Tan Biónica lo reforzó con una participación en De abajo para arriba, canción que cierra a todo trapo el show del grupo.
Si me permiten el rewind -juro que no afectará el estado de presente simple/complejo-, el momento en que Renzo Luca (cantante) dice que van a hacer un clásico del rock nacional, mi corazón (y su prontuario) empezó a musicalizar el recuerdo de una locución grabada en cinta viva: Se llama Costumbres argentinas y dice así…. Regresión a newsletter #13 (¿qué te parece?):
El problema es
otra vez la situación
cada vez peor
del corazón
Outdoor 2
El segundo día, después de picotear música por los tres escenarios, me desdoblo. Sale de mí un Leo distinto. Remera amarilla, tiras verdes, estampada: Brasil. Rulos típicos de un nene rubión que se hizo fan de una causa y emuló a su ídolo. Tengo 19 años, estoy en Regatas, toca La Vela Puerca. Escribo la primera crónica de mi autoría publicada en un medio digital (Poquet). La web cayó, archive.org no tiró a tiempo su salvavidas. Lloro. Igual retengo cosas en mi cajita de recuerdos: la sección de vientos, los hits hechos ahí nomás de su grabación, la dupla Enano-Cebolla. Veinte años no es nada. Adelante agitan banderas blancas, percutidas, unos cuantos Marty McFly. Al lado de Agus, me siento un Doc Brown desajustado que juega sus fichas a una canción que no llega.
En el ínterin salgo a caminar. Lo veo a El Purre (José Giménez Zapiola). A días del estreno de la serie Cromañón se viene para hacerle el aguante a sus amigos de Cruzando el Charco. Cruzamos el charco de silencio: “Felicidad absoluta”, dice.
Fundido a negro en la noche santafesina. Se enciende la pantalla. Mano/casete/grabadora. Adelanta, rebobina, escucha. Hace zapping. Trueno. Con estridencia aesthetic, Mateo justifica nombre artístico y galones del presente. Irrumpe, bardea, gatilla, salta. Es el líder rapero de una banda de rock. Pasan las canciones (Tierra zanta, Tranky funky, Dance crip) pero yo sigo colgado. Colgado de la cinta. La cinta magnética de un casete regrabado en casa. En casa allá por los 90. Los primeros 90. Anagramas de yapa. (1) No-venta: aventón. (2) Trueno: un reto.
Indoor 2
No lo sabíamos, pero esas eran nuestras mixtapes caseras. Las mixtapes son esas cintas que hacían los DJ 's antes de Internet. El año pasado conversé con Dano en una edición de la Entrevista Federal de Radio Nacional. Dano es un productor y rapero argentino que hace años se radicó en Europa y hoy reside en Madrid. Le pregunté por la impronta retro de su obra y la influencia que tuvieron las mixtapes en la grabación de El hombre hace planes, Dios se ríe (2023). Esto me respondió (minuto 27:08):
Solo tiro dos líneas de su respuesta, en donde suma el factor cultura hip hop que se basa en sacar pedacitos de cosas. O sea, samplear. Integrar. Pienso... Un festival es como una mixtape del presente. Fe estival: viva, urgente, inapresable.